viernes, 2 de diciembre de 2011

Acuerdos de la Asamblea del 28 de noviembre

EJE DE MOVILIZACIÓN
Se concreta el día 13 de diciembre como fecha de celebración de las Jornadas formativas-informativas :

"DERECHO A UN TECHO"
Lugar: CEIP Carmen Sedofeito
Hora: 18:00 horas


Alumnos/as del IES Quiñones se encargarán de realizar el diseño del cartel.
Se decide publicitar a través de redes sociales. Carteles para AMPAs y centros docentes. 

Asimismo, se acuerda el día 12 de diciembre para la realización de una rueda de prensa donde se dará a conocer la plataforma y su manifiesto.

Diversas AMPAs están siendo informadas de la Plataforma y adhiriendose a ésta.
Como fruto de esta puesta en contacto entre AMPAs se ha puesto en marcha una campaña de intercambio de juguetes.

EJE DE EDUCACIÓN

El I.E.S Quiñones tiene previsto representar la obra de teatro cuyo tema principal es el derecho a la vivienda en centros de la localidad.
El C.E.I.P. Carmen Sedofetio está realizando material educativo para trabajar este tema con los alumnos/as.
Se denota una falta de existencia de material con este contenido.

LOS TRES CERDITOS. Cuentos políticamente correctos de JAMES FINN GARNER

 Inspirada por Chus os dejo el cuento de los tres cerditos en versión políticamente correcta:

Había una vez tres cerditos que vivían juntos en armonía y mutuo respeto con el entorno que les rodeaba. Sirviéndose de los materiales propios de la zona que habitaban, se construyeron cada uno una hermosa casa. Un cerdito se la construyó de paja, otro de madera y el último de ladrillos fabricados a base de estiércol, arcilla y zarcillos y posteriormente cocidos en un pequeño horno. Al terminar, los tres cerditos se sintieron satisfechos de su labor y siguieron viviendo en paz e independencia.

Pero su idílica existencia no tardó en verse desbaratada. Un día, pasó por allí un enorme lobo malo con ideas expansionistas. Al ver a los cerditos, se sintió sumamente hambriento, tanto desde un punto de vista físico como ideológico. Cuando los cerditos vieron al lobo, se refugiaron en la casa de paja. El lobo corrió hasta ella y golpeó la puerta con los nudillos, gritando:

-¡Cerditos, cerditos, dejadme entrar!

Pero los cerditos respondieron:

-Tus tácticas de bandidaje no te servirán para amedrentar a unos cerditos empeñados en la defensa de su hogar y su cultura.

Pero el lobo se negaba a renunciar a lo que consideraba su destino ineludible. En consecuencia, sopló y sopló hasta derribar la casa de paja. Los cerditos, atemorizados, corrieron a la casa de madera con el lobo pisándoles los talones. El solar en el que se había alzado la casa de paja fue adquirido por otros lobos para organizar una plantación bananera.

Al llegar a la casa de madera, el lobo volvió a golpear la puerta y gritó:

-¡Cerditos, cerditos, dejadme entrar!

Pero los cerditos gritaron a su vez:

-¡Vete al infierno, condenado tirano carnívoro e imperialista!

Al oír aquello, el lobo se rió condescendientemente para sus adentros. Pensó para sí: «Va a ser una lástima que tengan que desaparecer, pero no se puede interrumpir la marcha del progreso.»

A continuación, sopló y sopló hasta derribar la casa de madera. Los cerditos huyeron a la casa de ladrillo con el lobo pisándoles nuevamente los talones. Al solar que había ocupado la casa de madera acudieron otros lobos y fundaron una urbanización de recreo en multipropiedad destinada a lobos en período de vacaciones, diseñando cada unidad como una reconstrucción en fibra de vidrio de la antigua casa de madera e instalando tiendas de recuerdos típicos de la localidad, clubes de submarinismo y delfinarios.

El lobo llegó a la casa de ladrillos y, una vez más, comenzó a aporrear la puerta, gritando:

-¡Cerditos, cerditos, dejadme entrar!

Esta vez, y a modo de respuesta, los cerditos entonaron cánticos de solidaridad y escribieron una carta de protesta a las Naciones Unidas.

Para entonces, el lobo comenzaba a irritarle la obcecación de los cerditos en su negativa a contemplar la situación desde una perspectiva carnívora, por lo que sopló y resopló y volvió a soplar hasta que, de repente, se aferró al pecho con las manos y se desplomó muerto como consecuencia de un infarto producido por el exceso de alimentos ricos en grasas.

Los tres cerditos celebraron el triunfo de la justicia y realizaron una breve danza en torno al cadáver del lobo. Su siguiente paso consistió en liberar sus tierras. Reunieron a un ejército de cerditos que se habían visto igualmente expulsados de sus propiedades y, con su nueva brigada de porcinistas, atacaron la urbanización con ametralladoras y lanzacohetes y dieron muerte a los crueles opresores lobunos, transmitiendo con ello un mensaje inequívoco al resto del hemisferio de no entrometerse en sus asuntos internos. A continuación, los cerditos fundaron un modelo de democracia socialista dotado de educación gratuita, un sistema universal de seguridad social y viviendas asequibles para todos.

Nota del autor: El lobo de este relato representa una imagen metafórica. Ningún lobo real ha sufrido daño alguno durante la redacción de esta historia.